En los últimos meses, he tenido el privilegio de establecer conexiones significativas con numerosos actores del sector turístico en Venezuela a través de las redes sociales. Sin embargo, más allá de simples interacciones virtuales, he entablado conversaciones enriquecedoras con operadores que han compartido auténticos tesoros escondidos en nuestro país. Estos destinos, aún no completamente explorados, revelan la riqueza natural y cultural que caracteriza a Venezuela. Es un recordatorio palpable de la bendición que representa contar con lugares espectaculares en nuestras tierras, dotadas no solo de abundantes recursos minerales, sino también de rincones dignos de ser mostrados y apreciados.
Esta experiencia me ha llevado a reflexionar sobre la responsabilidad colectiva que compartimos como venezolanos. Mas allá de buscar más recursos o elementos externos, lo que realmente necesitamos es un compromiso genuino para impulsar el sector turístico de nuestro país. Observo con entusiasmo cómo las personas con las que he conectado reaccionan emocionalmente a mis publicaciones, participan activamente y comparten sus propias experiencias y amor por Venezuela. No obstante, es crucial que este entusiasmo trascienda las plataformas digitales y se traduzca en acciones tangibles. La nostalgia y la aprobación deben convertirse en un motor que impulse esfuerzos reales.
Es imperativo que cada sector de la sociedad asuma su compromiso y contribuya al fortalecimiento del turismo en Venezuela. Cada individuo, desde su espacio y con sus capacidades, tiene un papel vital que desempeñar. Cada ladrillo construido, cada servicio de calidad ofrecido, cada aporte al sector, se convierte en un eslabón esencial para alcanzar esta meta compartida. No hay lugar para excusas; la materialización de este sueño solo será posible si cada uno de nosotros adopta la convicción de que sí es posible. Creer en el potencial de nuestro país y trabajar unidos para hacerlo realidad es el camino hacia un futuro turístico próspero y sostenible.
En este llamado a la acción, insto a todos los amantes de Venezuela a canalizar su entusiasmo y compromiso en acciones concretas. Cada narrativa compartida, cada imagen publicada, tiene el poder de inspirar a otros y fomentar un movimiento colectivo hacia el fortalecimiento de nuestro turismo. No subestimemos el impacto positivo que puede tener cada pequeño esfuerzo. Es hora de dejar huella y construir un legado turístico que refleje la grandeza de nuestra nación. La tarea es desafiante, pero la recompensa, en términos de un país más próspero y reconocido internacionalmente, vale la pena cada paso que demos juntos hacia este objetivo común.
Nuestro compromiso con el desarrollo turístico de Venezuela debe trascender las palabras y reflejarse en acciones concretas desde cada rincón de la sociedad. La unión de esfuerzos, la creencia en el potencial de nuestro país y la dedicación a mostrar y preservar nuestros tesoros turísticos son la clave para construir un futuro vibrante y exitoso.
Saludos. Excelente de acuerdo Juan. Por eso hemos creado el Observatorio Turístico Nacional de Venezuela, para pensar, medir y proyección del turismo, con mirada científica, académica e investigativa, como lo hacen los países hermanos potencia en el sector. Abrazos. Dra. Yanitza Albarrán.
Excelente Dra Yanitza, es una labor muy importante que todos los operadores del sector estén informados con data en tiempo real para la eficiente gestión de sus operaciones. Estoy a la entera disposición para colaborar.Saludos Cordiales para ti y todo tu equipo.